La receta de hoy ha sido
un poco de casualidad. El otro día hablando con una compañera de trabajo
mientras me tomaba unas galletas tipo Digestive, me comentó que ella hacía
granola casera y que muchas veces se traía al trabajo un poco para comer en el
tiempo de descanso, como un snack sano. ¿Granola? Para seros sincera era la
primera vez que lo escuchaba, pero desde luego ya no va a ser la última porque
me ha encantado.
La granola es un alimento
perfecto para el desayuno y la merienda porque es altamente nutritivo y muy
saludable. Está compuesta por copos de avena, nueces u otros frutos secos y
semillas, todo mezclado con miel o sirope de arce o ágave y horneado hasta
quedar crujiente. Una vez preparada podemos consumirla sola, junto con yogurt
(si es griego mucho mejor) o con la leche, como los típicos cereales.
Además podéis cambiar
algunos ingredientes, o añadir otros, y así hacer una granola a vuestro gusto. A mi ya me han pedido
en casa que la siguiente la haga con frutas. ¡Qué ganitas tengo ya de hacerla!
INGREDIENTES:
- 150 gr copos de avena
- 50 gr frutos secos
- 30 gr semillas
- 1 cucharada de cacao puro en polvo
- ½ cucharadita de canela
- ½ cucharadita de sal
- 50 gr de azúcar moreno o panela
- 20 ml de miel
- 30 ml de sirope de arce o de ágave
- 1 cucharada de aceite de girasol, de oliva sabor
suave o de coco
- ½ cucharadita de extracto de vainilla
- 40 gr de chips de chocolate
ELABORACIÓN:
1 – Precalentamos el horno
a 140-150 ºC.
2 – Troceamos los frutos
secos, bien picándolos con el cuchillo o también se puede hacer en el
mortero.
3 – En un bol grande
ponemos la avena, los frutos secos, las semillas, el cacao, el azúcar, la canela y la sal,
y mezclamos bien todo.
4 – En otro bol mezclamos
la miel, el sirope, el aceite y el extracto o esencia de vainilla.
5 – Agregamos esta última
preparación a los ingredientes secos y removemos con un tenedor hasta que todo
esté bien mezclado.
6 – Forramos la bandeja
del horno con papel vegetal, vertemos encima nuestra mezcla, y extendemos con
el tenedor.
7 – Horneamos a 140-150º
durante unos 6 minutos, removemos un poco la granola para que se nos tueste
por igual por todos lados y volvemos a meter en el horno otros 6 minutos. Hay que estar pendiente para que no se nos queme.
Sacamos del horno y
colocamos la bandeja sobre una rejilla.
Veréis que no queda duro,
pero no os preocupéis porque al enfriarse se endurece mucho. Si no fuera así
siempre podéis volver a meterlo al horno 5 minutos más.
8 – Vamos dando vueltas a
la granola de vez en cuando, y cuando esté templada le añadimos los chips de
chocolate y volvemos a remover.
9 – Una vez que se enfríe por completo la guardamos en un recipiente hermético. Se puede conservar
perfectamente durante 2-3 semanas.
RECOMENDACIONES:
- Cuando metemos la granola en el horno hay que tener cuidado porque se quema con facilidad. Para correr menos riesgos podemos bajar un poco la temperatura y dejarlo más tiempo. Otra opción es ponerlo en una fuente apta para horno en vez de directamente en la bandeja como hice yo. De esta forma quedará una capa más gruesa y por lo tanto tardará más en tostarse. Pero no olvidéis que de cualquiera de las maneras hay que ir removiendo de vez en cuando para que no se apelmace.
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