martes, 30 de agosto de 2016

Tarta acuarela


Otro añazo más que hace mi princesa. ¡Y ya van 12! Cómo pasa el tiempo de rápido cuando tienes un hijo. Pero qué bonito es verles crecer tan bien. Así que hay que celebrar este día especial como se merece, y mi “peque” se merece la tarta más bonita del mundo mundial. Y creo que lo he conseguido con esta tarta basada en una de Sweetapolita. He cambiado algunas cosas que me dieron un poco de quebradero de cabeza, como el frosting. Era muy fácil realizarlo, pero no me agradó el sabor, y el color quedaba amarillento por la mantequilla que llevaba, y yo necesitaba que fuera blanco. Así que lo cambié. En lugar de frosting de crema de mantequilla yo he utilizado nata y mermelada de fresa para el relleno, y frosting de merengue suizo para cubrir la tarta. El resultado...¡espectacular! Y lo mejor de todo es que a mi hija le encantó.