Para el cumpleaños de mi
suegra quería hacer una tarta de limón porque a ella le gusta mucho (no os preocupéis
que publicaré esa tarta en breve). Tenía la idea perfectamente en mi cabeza y
busqué en internet. Y descubrí que esa tarta no me la había inventado yo. ¡Ya
estaba inventada y había recetas de ello! Así que, después de la desilusión
inicial (por no ser una inventora de tartas jiji) me alegré que una de las
recetas fuera la del blog “Un pedacito de cielo”. Y esa es la que he seguido para
este delicioso bizcocho (con mis pequeñas variaciones de siempre).
No os hacéis una idea de
lo bueno que está con ese pequeño toque a limón que le da un frescor increíble.
Yo lo utilicé para hacer una tarta, pero podéis comerlo tal cual en la merienda
o en el desayuno. Cualquier ocasión es buena para hincarle el diente a este
bizcocho.