Praliné de avellanas

La receta de hoy es una de esas que sirve como base para preparar otros deliciosos postres: el praliné, concretamente…éste va a ser de avellanas. El praliné es una crema hecha de frutos secos caramelizados y triturados hasta que sueltan sus aceites y forman una pasta. Normalmente lo utilizamos para rellenar bombones, pero hoy hago esta receta para otro uso mucho más navideño, así que no os podéis perder mi siguiente publicación.

INGREDIENTES:

- 200 gr de avellanas tostadas

- 200 gr de azúcar

- 2 cucharadas de agua

- Un chorrito de limón (para evitar que el caramelo cristalice)

ELABORACIÓN:

1 – En un cazo ponemos el azúcar, el agua y el chorrito de limón y calentamos a fuego medio hasta que esté dorado. Durante este proceso no removeremos demasiado el caramelo porque sino se nos cristalizará. Como mucho podemos mover un poco el cazo (con movimientos circulares) para integrar los ingredientes cuando el azúcar comience a fundirse.

2 – A continuación añadimos las avellanas, damos unas cuantas vueltas para mezclarlas con el caramelo y lo vertemos sobre una lámina de papel vegetal. Dejamos hasta que se enfríe por completo.

3 – Cortamos en trozos y los trituramos en un procesador de alimentos tipo Thermomix o similar.

Al principio quedarán las avellanas pulverizadas que sería una decoración estupenda para una tarta. Pero ese no es el propósito de esta receta, así que seguiremos triturando.

Poco a poco, las avellanas irán soltando sus aceites hasta formar una crema bastante líquida. Durante este proceso tendréis que ir parando vuestro procesador de alimentos para bajar los restos de avellanas que se quedan pegados en las paredes. Al principio parece que nunca quedará líquido, pero no desesperéis porque al final…llega.

Guardamos en un bote hermético y lo conservamos en el frigorífico. Durará muchísimo tiempo porque al llevar tanta cantidad de azúcar se conserva estupendamente.

NOTAS:

• Para hacer esta receta me he basado en la del blog My European Cakes. Hay otra forma de hacer praliné, más rápida aún que esta, pero utilizaban leche en polvo. No sé si habéis visto el precio de esta leche. ¡Pues yo tampoco hasta ayer! Y para 40 gr. que se necesitaba no iba a comprar 1 kg.
• Y un consejito obvio pero importante es que cuanto mejor sea la calidad de las avellanas…más rico será el resultado final.

Si te ha gustado la receta, no te la guardes
y compártela con tus amigos