Tarta de doble chocolate y Swiss Meringue Buttercream de fresa

No sé ni cómo describir lo impresionantemente rica que está esta tarta. Me faltan y me sobran las palabras, así, todo a la vez. Y es que con verla ya se te hace la boca agua. Pero cuando empiezas a saborearla, a distinguir los diferentes sabores y texturas, uuummmm….es para volverse loco. Comienzas notando la esponjosidad del bizcocho con un potente y sabroso sabor a chocolate, y seguidamente te viene un ligero sabor a fresa de una crema de merengue suave y sedosa que se te deshace en la boca. Y de repente, un estallido de sabor de un maravilloso e intenso chocolate del glaseado. ¿Se puede pedir más a una tarta?

Para hacerla he seguido las recetas de “El Rincón de Bea” y “Sweetapolita” (con esta última he podido practicar el inglés jiji). Son parecidas, pero no iguales. Y yo he utilizado lo que me ha parecido mejor de cada una. Lo único que he cambiado es que he añadido más puré de fresa al Swiss Meringue Buttercream para que tuviese más sabor, y he adaptado la receta para poder hacerla todos aquellos que no tenemos KitchenAid o similar. El resultado…salta a la vista. ¡Simplemente delicioso!

Y os tengo que confesar una cosa. Yo no estaba muy convencida de hacer este bizcocho. La cantidad de cacao puro en polvo me parecía exagerada y pensé que quedaría demasiado fuerte para mi gusto. Pero nada más lejos de la realidad. No se hace nada pesado. ¡Y queda tan esponjoso y suave…! 

Y con respecto al Strawberry Swiss Meringue Butercream…no tenía dudas, tenía miedos jiji. Hace tiempo que quería hacerlo, pero lo veía tan complicado que no me atrevía. Pero ha salido a la primera, así que tan complicado no será, ¿no? Y el sabor y la textura son impresionantes. 

Bueno…ya os dejo disfrutar de esta tarta, que comencé sin palabras y ahora no callo jiji. ¡Os va a encantar!

INGREDIENTES:

Para el bizcocho doble chocolate:

- 250ml. de agua

- 60 gr. de chocolate de postres (55-70%)

- 210 gr. de harina

- 125 gr. de cacao puro en polvo

- 1 y ½ cucharadita de bicarbonato

- ½ cucharadita de levadura química

- ¾ cucharadita de sal

- 2 huevos L

- 350 gr. de azúcar

- 125 ml. de aceite de oliva sabor suave

- 250 ml de buttermilk

(se puede hacer con 240 ml. de leche entera a temperatura ambiente y 10 gr. de zumo de limón)

-         ½ cucharadita de extracto de vainilla

(en su ausencia…esencia de vainilla)

Para el Strawberry Swiss Meringue Buttercream:

- 150 gr. de claras frescas o pasteurizadas

- 250 gr. de azúcar

- 350 gr. de mantequilla a temperatura ambiente y cortada en cubitos

- 1 pizca de sal

- 1 cucharadita de extracto de vainilla

- 100 gr. de puré de fresas (fresas trituradas)

- Unas gotas de colorante rosa o rojo (opcional)

Para el glaseado de chocolate:

- 115 gr. de chocolate de cobertura

- 76 gr. de mantequilla

ELABORACIÓN:

Bizcocho doble chocolate:

1 – Ponemos a calentar el agua en el microondas hasta que empiece a hervir. Después se lo añadimos al chocolate de postres que habremos cortado en trocitos y removemos hasta que se disuelva por completo. Dejamos que se atempere un poco hasta que tengamos que utilizarlo.

2 - Si no tenemos buttermilk comercial, mezclaremos la leche y el zumo de limón, removemos y lo dejamos hasta que tengamos que utilizarlo (unos 10 minutos), momento en el que tendrá apariencia de leche cortada. 

3 – En un bol tamizamos la harina, el cacao puro en polvo, el bicarbonato, la levadura y la sal y reservamos.

4 – Engrasamos y forramos con papel vegetal nuestro molde. Yo he utilizado uno de 15 cm. para hacer los 3 bizcochos que necesitamos de esta layer cake. Pero si queréis sólo un bizcocho, utilizad un molde de 26 cm.

5 – Batimos los huevos y el azúcar hasta que blanqueen y aumenten su volumen. Mejor hacerlo con la batidora eléctrica, pero si no tenéis…pues a mano (¿no estamos en plena operación bikini? Jiji).

6 – Vamos añadiendo el aceite poco a poco, mientras batimos a velocidad baja, hasta que esté bien incorporado.

7 – Precalentamos el horno a 175 ºC.

8 – A continuación añadimos, poco a poco y mientras batimos a velocidad baja, el chocolate derretido y atemperado a la mezcla anterior.

9 – Añadimos el buttermilk y el extracto de vainilla de la misma manera que en el paso anterior.

10 – Por último, añadimos la mezcla de harina, cacao, etc., e incorporamos con movimientos envolventes. En la receta de “El rincón de Bea” dice que si os queda grumos podéis colarlo, aplastar los grumos del colador con una cuchara y tirar lo que no pase. Pero yo no lo hice y ha quedado genial. Así que aquí os lo dejo a vuestra elección. 

11 – Repartimos la masa en 3 partes iguales y horneamos, cada una de ellas, a 175ºC durante 25-30 minutos, o hasta que al pinchar en el centro del bizcocho con una aguja, ésta salga limpia. Tened en cuenta que este tiempo es para un molde de 15 cm. con 1/3 de la cantidad de la masa. Si lo hacéis en un molde de 26 cm. con toda la masa necesitaréis más tiempo. No he hecho este bizcocho en ese tamaño, pero por mi experiencia con otros bizcochos serán unos 40-45 minutos. Pero no os vayáis muy lejos de la cocina por si acaso.

12 – Dejamos atemperar 10 minutos en el molde y después desmoldamos y dejamos enfriar, boca abajo, sobre una rejilla. Cuando esté frío, forramos con papel film y dejamos reposar hasta el día siguiente.

Strawberry Swiss Meringue Buttercream:

13 – Ponemos en un bol al baño María las claras y el azúcar y removemos continuamente con un batidor, para que no se cuajen las claras, hasta que lleguen a 65ºC. Si no tenéis termómetro de cocina lo podéis hacer a ojo hasta que el azúcar esté disuelto por completo y las claras estén un poco calientes. Se tardará como 10-15 minutos.

14 – Sacamos del fuego y comenzamos a batir con un batidor eléctrico, o acabaréis sin brazo, a velocidad media-alta hasta que tengamos un merengue firme, brillante y precioso. Comprobad que está listo intentando colocar el bol boca abajo: si el merengue no se cae es que está perfecto. Pero ¡OJO! Aunque consigáis tener el merengue rápido, seguid batiendo hasta que el bol no esté caliente, porque sino se derretirá la mantequilla que tenemos que añadir a continuación.

15 – A continuación bajamos la velocidad de la batidora al mínimo y vamos añadiendo los cubitos de mantequilla de uno en uno. No añadimos el siguiente hasta que el anterior esté completamente integrado en el merengue.

Llegará un momento en el que la textura empiece a cambiar. No os asustéis ni os preocupéis. Seguid batiendo porque va todo fenomenal. Y en caso de que la consistencia fuera muy líquida, metemos nuestro merengue 15 minutos en el frigorífico y seguimos batiendo.

16 – Añadimos la vainilla y la sal. Y por último, el puré de fresas. Si veis que con el puré de fresas no coge suficiente color, le añadís un par de gotas de colorante rojo o rosa .

Para el glaseado de chocolate:

17 – Ponemos a calentar al baño María el chocolate y la mantequilla, y vamos removiendo hasta que se derritan y se integren.

Para poder utilizarlo en la tarta, ésta tiene que estar fría, y  el chocolate tenemos que dejar que se atempere un poco.

Montaje de la tarta:

18 – Igualamos los bizcochos cortando, con una lira o con un cuchillo de pan, la parte abombada de los bizcochos. Así nos quedarán todos rectos y del mismo grosor.

19 – Después, ponemos un poco del merengue sobre la base o el plato donde vayamos a poner la tarta. De esta manera se quedará en el sitio y no se nos moverá para cualquier lado.

20 – Colocamos uno de los bizcochos (yo los coloco boca abajo) y después una capa del Swiss Meringue Buttercream (SMBC) de fresa. Cada uno puede echar la cantidad que quiera pero yo le echo unas 3 cucharadas. De esta manera vamos colocando todas las capas.

21 – Cubrimos nuestra tarta con una capa fina del SMBC. No importa que se trasparente el bizcocho. Esta primera capa es para sellar y que la tarta no suelte migas. Metemos en el frigorífico, al menos media hora, hasta que se endurezca.

22 – Después le damos otra capa de SMBC, pero esta vez bastante generosa para cubrir todo. Alisamos bien por arriba y por los laterales con una espátula larga. Cuando no tenía espátulas lo hacía con la parte de atrás de un cuchillo largo de pan que tengo porque es recto.

23 – Cuando la tarta esté bien fría le echamos por encima el glaseado de chocolate. Pero no le añadáis todo, porque con esa cantidad sobra un poco para las fresas de decoración. No tengáis miedo al echar el chocolate. Solo tenéis que verter la cantidad que queráis e inclinar un poco la base de la tarta en distintas direcciones para que el chocolate resbale por los lados. Os quedará impresionantemente bonito.

¿No os parece una pasada de tarta?

CONSEJOS:

-     En otras tartas, un día hacía el bizcocho y el frosting y al siguiente la montaba. Pero en esta es mejor hacer los bizcochos un día, y el SMBC y el montaje al siguiente. Si no lo hacéis así, sacad el SMBC del frigorífico dos horas antes del montaje para que esté lo suficientemente blando y manejable como para cubrir la tarta.

-      Buttermilk: Es un suero de leche que se utiliza muchísimo en las tartas americanas. Hace que los bizcochos queden muy jugosos. Se puede comprar en tiendas especializadas y supongo que debe haberlo en el Lidl y Corte Inglés, pero nunca he ido a comprarlo porque es increíblemente fácil prepararlo, como ya he puesto antes. Si en la receta necesitas 250 ml. de buttermilk, pones 240 ml. de leche entera a temperatura ambiente y le añadimos 10 ml. de zumo de limón. Removemos y al cabo de 10 minutos tendrá apariencia de leche cortada o yogur líquido. Así de fácil.

-   Antes de consumir la tarta tendréis que sacarla un rato antes del frigorífico para que el Swiss Meringue Buttercream vuelva a quedar suave y perfecto. Con el calorcito que está haciendo en Badajoz vale con sacarla media hora antes. Si hace más frío necesitarás más tiempo.

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