El baño de vapor es una técnica muy usada en repostería, sobre todo para fundir chocolate. Es muy parecida al baño María, pero la diferencia es que el bol donde vamos a fundir nuestro chocolate, no llega a tocar nunca el agua del cazo. Con esta técnica se consigue que el chocolate mantenga perfecta su estructura y que los ingredientes, que normalmente usamos para fundir con él, no se cortan.
1.- Lo primero es poner a calentar un cazo con muy poquita agua (como un dedo, más o menos).
2.- Encima ponemos un bol que encaje y no toque el fondo del cazo ni, por supuesto, el agua, ya que se tiene que fundir con el vapor.
3.- Ya solo queda echar en el bol el chocolate troceado y remover hasta que se funda por completo. Podemos añadir mantequilla (que le da brillo) o leche o nata (que aligeran el chocolate).
Qué originales!! A ver si tengo un ratillo, y las hago...jeje!
ResponderEliminarHola!!! Supongo que te refieres a las palmeritas, no? jiji. Son muy muy fáciles de hacer y no se tarda nada. Además están....requetebuenas! Ya me contarás qué tal.
EliminarUn saludo.