Bizcocho de vainilla

¡Qué decir de este delicioso bizcocho! Está tan rico que me quedo sin palabras. En un principio no me llamaba la atención porque no es tan sencillo de hacer como otros. Pero como era una receta de Sweetapolita le di una oportunidad, y no me arrepiento en absoluto. El sabor es exquisito, pero su esponjosidad es...increible. No puedo compararlo con ningún otro. Me encanta, y sé que a vosotros os va a encantar también.

INGREDIENTES:

(para 3 bizcochos de 20 cm. de diámetro)

- 4 huevos a temperatura ambiente

- 2 yemas de huevo a temperatura ambiente

- 300 ml. de buttermilk o suero de leche

- 2 cucharaditas (10 ml.) de extracto de vainilla

- 345 gr. de harina de repostería tamizada

- 400 gr. de azúcar

- 1 y ½ cucharada (17 gr.) de levadura química

- 1 cucharadita (5 gr.) de bicarbonato sódico

- ½ cucharadita (4 gr.) de sal

- 225 gr. de mantequilla sin sal, a temperatura ambiente y cortada en cuadraditos

ELABORACIÓN:

1 – Precalentamos el horno a 175 ºC.

2 – Engrasamos y forramos, con papel vegetal, el molde del bizcocho.

3 – En un bol batimos los huevos, las yemas, ¼ de buttermilk y el extracto de vainilla. Reservamos.

4 – En otro bol grande mezclamos la harina, la levadura y el bicarbonato sódico tamizados, y después añadimos y mezclamos también la sal y el azúcar.

5 – Añadimos la mantequilla de trocito en trocito y batimos a velocidad baja. No añadimos el siguiente trozo hasta que el anterior esté prácticamente incorporado. Tiene que quedar un aspecto como de cus cus.

Aunque en la receta original la mantequilla se añade fría, a no ser que tengáis un potentísimo robot de cocina con una pala (tipo Kitchen Aid), os será más fácil si ablandáis cada trozo un poquitín con la mano o si utilizais la mantequilla a temperatura ambiente.

6 – Añadimos el buttermilk que nos quedaba y mezclamos a velocidad media hasta que esté todo incorporado.

7 – Bajamos la velocidad a baja y vamos añadiendo la mezcla de huevo de poco en poco. Una vez que esté todo incorporado, subimos la velocidad a media y batimos 1 minuto más.

8 – Dividimos la masa en 3 parte iguales y horneamos cada bizcocho a 175ºC durante 20-25 minutos o hasta que al pinchar en el centro con una aguja fina esta salga limpia.

9 – Dejamos enfriar 10 minutos y desmoldamos sobre una rejilla. Dejamos enfriar completamente.

NOTAS:

• El buttermilk lo podéis comprar en tiendas especializadas o hacerlo vosotros mismos en casa. Solamente tenéis que mezclar unos 280 ml. de leche entera a temperatura ambiente y añadir unos 20 ml. de zumo de limón. Removemos un poco, dejamos reposar y listo. Tendrá aspecto de leche cortada, pero así está perfecto.
• Yo he hecho 3 bizcochos más finitos porque eran para una tarta de 3 pisos, pero podéis hacer 2 más gruesos o incluso 1 con un molde más grande. Eso sí, tendréis que aumentar los tiempos de horneado así que ¡OJO!

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